La Mejormanía

Sonido Yenyere: La historia del ícono sonidero que conquistó México y EE. UU. desde Tlalnepantla

Descubre la inspiradora trayectoria de Sonido Yenyere, el emblemático proyecto musical de Manuel y Alex Arreguín. 
jueves, 17 de julio de 2025 · 09:11

Desde la colonia Caracoles en Tlalnepantla, Estado de México, hasta escenarios en la Unión Americana, Sonido Yenyere se ha convertido en un pilar del movimiento sonidero gracias al esfuerzo, visión y fidelidad de Manuel y Alex Arreguín. En entrevista con Adrián Sierra “La Bomba” para La Mejormanía, los fundadores compartieron el recorrido de más de 47 años de lucha, anécdotas inolvidables y los valores que los mantienen vigentes.

Un sueño que nació en la colonia del Gas

“Sonido Yenyere nació como todos, con un sueño”, recuerda Manuel Arreguín. Inspirado por íconos como Sonido Fania, el proyecto tomó forma en una época donde los sonidos eran símbolo de comunidad, identidad y fiesta. Con humildes inicios —“un Rapsody, dos trompetas, un baflecito”—, tardaron medio año en recibir su segunda tocada. Pero después, “de ahí para el real”, dice con orgullo.

La fidelidad musical como sello personal

Uno de los rasgos que definió a Yenyere fue su compromiso con la música original y de calidad. “En vez de comprarme zapatos, me iba a Tepito por discos importados”, comenta Manuel. Durante años, acumuló una colección de acetatos con cumbias, salsas, charangas y guarachas, muchas traídas desde Colombia y Puerto Rico.

La pandemia: una prueba de fuego

Como muchos proyectos culturales, la pandemia fue un golpe devastador. “Me quedé sin ahorros”, confiesa Manuel. Acababa de invertir en luces y pantallas. Ante la necesidad, recurrió a su tesoro más preciado: vendió cerca de 1,000 discos. “Fue con ese dinero que salí adelante durante año y medio”, comparte.

El poder de la comunidad sonidera

Durante el confinamiento, Sonido Yenyere sobrevivió gracias a transmisiones en vivo y al apoyo de seguidores en Estados Unidos. “Nos decían: 'Quiero una transmisión en mi página. Ahí te van 200 dólares'”, relata Alex. Así lograron mantenerse firmes mientras otros proyectos desaparecían.

Del barrio al gabacho: la internacionalización del sonido

La popularidad de Yenyere trascendió fronteras. “Todo comenzó como un sueño y ahora viajamos constantemente a Estados Unidos”, comentan. Gracias a su estilo auténtico, han logrado conectar con paisanos que valoran la música como puente emocional con sus raíces.

Sonido Yenyere no es solo un grupo musical, es un testimonio de pasión, esfuerzo y resistencia cultural. Su historia, contada en La Mejormanía, refleja lo mejor del espíritu sonidero mexicano. Desde los bailes en la colonia del Gas hasta las transmisiones durante la pandemia, Manuel y Alex Arreguín son ejemplo de que cuando hay pasión y compromiso, la música nunca deja de sonar.